lunes, 18 de junio de 2007

voces

Sus manos sostenían fuertemente la almohada encima de su cabeza tapándose los oídos, pero el sonido continuaba, no podía concentrarse, siempre aislada, ensimismada; las voces siempre estaban, ni la música ni los ruidos los cesaban, esas voces continuaban, aun en sueños las escuchaba, interrumpían su dormir, no podía ni conciliar el sueño, poco a poco se fue convirtiendo en un zombi sin expresión, el sonido de esa pequeña voz iba en aumento. A todas horas estaba presente, aconsejando, maldiciendo, siempre con ese dolor en los oídos, a veces hablaba con esa pequeña voz y esta le contestaba, no sabia si se estaba volviendo loca pero la gente ya la miraba como tal, un dia la voz no paro de hablar y el dolor de los oídos era tal que pereciese que le taladraría el cerebro, la sangre escurría hasta su cuello, al punto del desmayo llego a un hospital de inmediato la condujeron a una sala de operaciones en donde el doctor le extrajo de sus oídos un pequeño y gordo gusano que se alimentaba de sus ideas.

2 comentarios:

Jobove - Reus dijo...

gracias por pasar, estamos a tu disposición para lo que te convenga

besos

Danka dijo...

Te he empezado a leer también, gracias por visitarme, me encanta tu estilo y tu extremo razgante en la palabra. Nuevo lector de tus POST